LA CASA DE BERNARDA ALBA

Espectáculo dirigido por Lluís Pascual. Esta generación no es la mía y estos nombres abruman un poco, estas sesiones son una oportunidad.

La sesión estaba prevista en Barcelona pero las agendas hicieron que nos encontráramos en Madrid. A mí me hubiese gustado poder tirar en mi estudio, porque en Madrid nos cedieron una sala (Teatro de la Abadía), teníamos una horita y yo no conocía el espacio. Todos estos detalles creaban incertidumbre y la sesión no estaba muy controlada.

Lluís Pascual hizo algunas indicaciones pero fue muy generoso y nos presentábamos en la sesión sin ningún guión especial. Era una imagen para la Casa de Bernarda Alba, pero sin querer hacer más de lo que podíamos. La sesión la planteé para hacer un buen retrato a Núria Espert.

Hicimos 5 fotos para probar la luz y ver que todo funcionaba. De repente Núria pidió verlas, no estaba en mi mente esta rápida petición… ay,ay..…las observó en silencio durante 5 larguísimos segundos, levantó la mirada y comentó: bien, me gustan,…seguimos. Este momento fue el más importante.

En una sesión de fotos, si alguien ve fotos que no son de su agrado es prácticamente imposible levantarla, sobre todo si hay poco tiempo. A partir de ese momento Núria siguió las indicaciones con total confianza.

También es cierto que poco hay que decirle, sabe colocarse con exactitud y probablemente sabía bastante mejor que yo la imagen que necesitábamos y podíamos hacer en ese momento.

La sesión fue muy corta, probablemente la más corta que he realizado, y en 15 minutos ya lo teníamos. Hicimos solo una posición, una luz, y unas 20 imágenes.

Núria preguntó si necesitábamos más, yo no tenía mucho más que proponer y dimos la sesión por terminada.

La verdad es que cuando trabajas con gente con tanta experiencia y oficio se nota muchísimo. Las sesiones que a priori parecen las más complicadas se vuelven las más sencillas y cada oportunidad así es un regalo.

Sesión con Núria Espert

Aquí también tenéis un enlace de las fotos del espectáculo realizadas en el Teatro Nacional de Cataluña (tnc).

Fotografías David Ruano y Paco Amate